Residuos

¿Qué son los residuos? 

La palabra residuo describe el material que pierde utilidad tras haber cumplido con su misión o servido para realizar un determinado trabajo.

Un residuo es cualquier material que se considera sin valor suficiente para ser conservado. Se diferencia de la basura, que son desechos producidos por los humanos y que no pueden ser reutilizados o reciclados. 

¿Qué es la gestión de residuos? 

La gestión de residuos es el conjunto de actividades necesarias para el tratamiento de los desechos, desde su generación, hasta su eliminación o reaprovechamiento. Eso incluye la recogida de los residuos, su transporte, la gestión de los que son especialmente peligrosos y el reciclaje de los materiales aprovechables.

Con el tiempo, la gestión de residuos ha cobrado una gran importancia por motivos ecológicos y económicos. Antes, la gestión de los residuos consistía en transportar los residuos a un lugar apartado y usar la incineración como método de destrucción. Hoy en día, en cambio, se han desarrollado procesos de reciclaje. Además, se ha mejorado la concienciación sobre la generación de residuos, lo que ha influido en el diseño de los productos, y el consumo de estos.

¿Cuáles son las fases de la gestión de residuos?

1. Recogida en el punto de generación, como puedan ser nuestros hogares.
2. Transporte hasta los lugares adecuados para el procesamiento.
3. Procesamiento en plantas preparadas para reaprovechar lo posible.
4. Disposición final de los residuos que no han podido ser reaprovechados de ninguna manera.

¿Cuáles son los objetivos de la gestión de residuos?

• Minimizar en lo posible la generación de residuos.
• Reutilizar al máximo los materiales antes de transformarlos en residuos.
• Transformar los residuos para reciclarlos.
• Concienciar y educar sobre la gestión de residuos.
• Mejorar el alcance de una gestión integral de residuos para que llegue a todas partes.
• Usar métodos de tratamiento y eliminación que permitan la recuperación de energía y creación de combustibles (dos ejemplos del cumplimiento de este objetivo son Suecia y Noruega, que llegan a ser importadores de basura para generar energía).
• Maximizar el reaprovechamiento de los residuos para tareas de abono y fertilización.
• Fomentar nuevas tecnologías de eliminación, más ecológicas y menos dañinas que los métodos tradicionales.

Dentro de estos objetivos, los más importantes son los de prevenir la generación de residuos y minimizarlos cuando se produzcan. A continuación, encontraríamos los de reaprovechar y reciclar al máximo para ahorrar materiales, generar energía y abono. Por último, estaría el de disponer de los residuos no reciclados de la forma menos dañina posible. Estos objetivos conectan con el concepto de Economía Circular y han sido sintetizados en el lema: reduce, reuse, recycle (reduce, reúsa, recicla), que se ha convertido en estilo de vida para muchos.

¿De qué forma se puede disponer de los residuos?

Tradicionalmente, ha habido dos formas principales de disponer de los residuos, que no contribuían a reaprovechar materiales o generar energía.

1. Los vertederos: lugares alejados de los núcleos de población donde la basura simplemente se deposita. Esto implica un gran riesgo de contaminación del suelo y las aguas; tampoco se controlan los efectos de residuos peligrosos que no se han tratado.
2. La incineración: consiste en quemar la basura. Es la forma más antigua de tratar residuos y produce emisiones contaminantes (y potencialmente tóxicas) que se liberan a la atmósfera.

Actualmente, se han desarrollado nuevas formas de disponer de los residuos:

1. Pirólisis: una incineración en tanques sellados con poco oxígeno. Eso produce una quema menos contaminante y más eficiente en cuanto a generación de energía aprovechable. En el caso de ciertos residuos orgánicos o vegetales, se puede usar para obtener combustibles.
2. Reprocesamiento biológico: la materia orgánica (e incluso el papel) se descomponen para formar compostaje, que sirve de abono para la agricultura.
3. Reciclaje: el material aprovechable, como aluminio, plástico o papel, sirve para crear nuevo aluminio, plástico o papel.
4. Tratamiento de aguas residuales: debido al gran crecimiento de las ciudades, el agua residual ha aumentado mucho. Mediante su tratamiento, se extraen diversos tipos de lodos que pueden ser usados en la agricultura como fertilizante.

¿Cómo hacer un plan de gestión de residuos de construcción? 

Un plan de gestión de Residuos de Construcción y Demolición (RCD) debe establecer acciones que potencien la reutilización, el reciclaje y la valorización de los RCD generados en todas las obras, bien sean de realización, rehabilitación, mantenimiento o emergencia.

Todo plan de gestión debe establecer las acciones adecuadas de manejo de los RCD de conformidad con lo dispuesto en la normativa vigente de gestión integral y cadena de valor de RCD. Los objetivos que debe prever son:

1. Determinar las acciones a ejecutar en los frentes de obra a fin de realizar una Gestión Integral de los RCD.
2. Dar cumplimiento a la normativa ambiental vigente.
3. Disminuir la disposición final de RCD a través de la implementación de acciones que permitan la reutilización, el reciclaje o la valorización de estos residuos.

Para cumplir con la normativa vigente, en todos los frentes de obra se debe:

• Prevenir o minimizar la generación de residuos.
• Disponer de un acopio temporal de residuos.
• Clasificar los RCD generados.
• Separar los residuos. 
• Reutilizar.
• Reciclaje.
• Transportar para la disposición final.

¿Qué referente de gestión de residuos existe en España?

La gestión de residuos es un tema crucial que preocupa cada vez más a las empresas de cara a reducir el impacto ambiental y con miras a contribuir al alcance de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. La empresa Ferrovial cuenta entre sus prioridades ofrecer infraestructuras y servicios que respondan a retos globales, como el cambio climático, la crisis energética o la pérdida de biodiversidad.

La sostenibilidad ambiental ha tenido siempre un papel relevante para Ferrovial no sólo desde la perspectiva de la responsabilidad o como un mecanismo para gestionar con más eficiencia cierto tipo de riesgos, sino también como una fuente de nuevas ideas y modelos de negocio (plantas de tratamiento de residuos, recuperación de materiales, reutilización de materiales procedentes de la demolición en obras, entre otros).

Ferrovial se ha comprometido con el desarrollo sostenible reportando cada año indicadores como emisiones de CO₂ (huella de carbono), consumo de agua, residuos o sanciones medioambientales. Además, fija objetivos para la mejora de su comportamiento ambiental y fortalece su estrategia climática mediante el desarrollo de infraestructuras y servicios para una economía verde de bajas emisiones.

Por ejemplo: los considerables volúmenes de movimiento de tierras en los contratos de construcción los han llevado a establecer un objetivo de reutilización para minimizar los impactos. La reutilización de tierras en el emplazamiento de construcción evita las emisiones que se generarían en el transporte, además de favorecer una mejor integración paisajística in situ. El objetivo es reutilizar el 80% de las tierras en construcción para 2021, tomando como año de referencia 2016.

Aspectos curiosos sobre residuos

• Por cada tonelada de papel que se recicla, se salvan 18 árboles.
• Cada año aumenta la cantidad de residuos que se generan: en los últimos 40 años se ha producido más residuos en el mundo que desde el origen del hombre hasta 1970.
• Al reciclar el aluminio se ahorra el 95% de la energía que es necesaria para producirlo.
• Según las estimaciones, para el año 2025, a nivel mundial, se producirá casi el doble de los residuos actuales, es decir, cerca de 6 millones de toneladas.
• Los residuos provenientes del suelo, de concretos y de materiales con un proceso de fabricación previo, alcanzan el 88% del total de residuos de la construcción.