Obras públicas
¿Qué se considera obra pública?
Una obra pública es una construcción promovida y llevada a cabo por la administración de un gobierno. Las obras públicas pueden ir desde infraestructuras hasta edificaciones y resultan de un proceso de contratación directa o por concursos de licitaciones. La financiación de estos proyectos se lleva a cabo con fondos públicos y su objetivo principal es que los habitantes de la comunidad en la que se realiza se beneficien de estas construcciones.
¿Qué tipos de obras públicas existen?
Al ser construcciones pensadas para el uso general, las obras públicas se clasifican en distintos tipos:
- Edificios públicos: pueden ser sanitarios, educativos, oficinas, museos, entre otros.
- Infraestructuras urbanas: calles, parques, alumbrado público, jardines, etc.
- Infraestructuras de transporte: vías terrestres —como autopistas, carreteras, autovías—, marítimas —como puertos y canales—, transporte aéreo —como aeropuertos— y ferroviario —como vías y estaciones de tren—.
- Infraestructuras hidráulicas: presas, redes de distribución, alcantarillado, depuradoras de agua, etc.
¿Cómo se desarrolla un proyecto de obra pública?
- Fase de preparación. Todo proyecto de obra pública nace con la identificación de una necesidad por parte de la entidad pública para cerrar brechas y beneficiar a la comunidad. En caso de que tenga un nivel de rentabilidad social apropiado, se considera un proyecto viable y se empieza a desarrollar el expediente técnico, un documento en el que se precisa la memoria descriptiva de la obra, así como sus especificaciones técnicas, planos, presupuesto, valor referencial, calendario de avance, estudio de suelos, etc. Este material es utilizado por el ejecutor de obra al momento de planificar y desarrollar el proyecto.
- Fase de contratación. El presupuesto destinado al desarrollo de obras públicas viene promovido por el gobierno de un territorio. No siempre existen empresas públicas constructoras para ejecutar una obra, razón por la que se requiere contratar una privada. Entonces, la contratación puede ser:
- Contratación directa, en la que el gobierno es el encargado de seleccionar la empresa que llevará a cabo la obra.
- Licitación pública, que responde a un método de concurso público en el que varias empresas privadas desarrollan una propuesta al gobierno para ejecutar el proyecto que este necesita desarrollar. La oferta que mejor se adapte a las necesidades de la obra, en cuanto a tiempo de ejecución, presupuesto y calidad, resulta ganadora en el proceso de licitación.
- Fase de ejecución. Una vez aprobado el expediente y teniendo contratada la empresa que va a desarrollar el proyecto, se procede a la ejecución de la obra en el espacio físico elegido. En esta etapa se formaliza el contrato, estableciéndose cláusulas administrativas y técnicas; se abona el presupuesto a la empresa; y se empieza a ejecutar la obra en función a los tiempos planificados, con una constante dirección y supervisión hasta la finalización del contrato.
¿Cuál es la diferencia entre una obra pública y una obra civil?
Si bien son términos que están vinculados de manera muy estrecha, entre la obra pública y obra civil hay pequeñas diferencias que las caracterizan y distinguen a cada una. Una obra pública siempre será civil, ya que integra infraestructuras, servicios y edificaciones que están planificados y ejecutados con miras a beneficiar a los ciudadanos.
No obstante, una obra civil puede ser pública o privada, es decir, que puede estar promovida por una empresa no gubernamental y no estar financiada por fondos públicos.
¿Cuál es la relación entre las obras públicas y el medioambiente?
En construcción, la mirada está puesta en la durabilidad y en el menor impacto medioambiental de las obras, desarrollando infraestructuras sostenibles que integren estructuras sociales, económicas y ambientales.
Dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, se plantea la obra pública como camino para la planificación de ciudades sostenibles, en las que puedan concretarse acciones en beneficio de las comunidades. Algunos ejemplos:
- Los Países Bajos, que dentro de la compra pública han definido temas de energía y clima, materiales y materia prima, calidad de vida, agua y suelo, biodiversidad, salud y bienestar para el desarrollo de sus obras de carácter público.
- España, que en 2021 desarrolló el proyecto Operación Asfalto en Madrid, enfocado en implementar un tratamiento descontaminante sobre el pavimento público, aplicándose mezclas asfálticas tipo Stone Mastic Asphalt (SMA), caracterizadas por ser más resistentes, sostenibles y duraderas.
- Canadá, que desarrolló un modelo de licitación para la construcción de carreteras públicas que evalúa las ofertas en función a costes del ciclo de vida completo de la carretera, estimando las emisiones de seis tipos de contaminantes y cómo reducir su impacto.
- Bélgica, que en el año 2001 realizó un estudio analizando los costes de ciclo de vida de dos carreteras, una hecha con hormigón y otra con asfalto, concluyendo que, aunque el precio de adquisición de asfalto es menor, el ciclo de vida del hormigón es mayor, siendo la opción más ventajosa a largo plazo y usándolo como material para este tipo de obra pública.