Fases de una construcción
Las fases de una construcción son aquellos pasos necesarios para completar una obra civil o edificación de forma segura.
Toda construcción, ya sea para edificación u obra civil, consiste en un proyecto que avanza a lo largo de varias fases constructivas. A estas fases de construcción, les preceden varios estudios, el anteproyecto, el proyecto técnico (que incluye memoria, planos y presupuesto, entre otros) y la solicitud y expedición de licencias con las que es necesario contar antes de empezar.
Además,en todas las etapas de construcción civil y de infraestructura —ya sea esta tender puentes como el de San Ignacio (Bilbao), ampliar túneles de metro como el de la Northern Line (Londres) o construir una nueva autopista como la Toowoomba (Australia)—, van acompañadas de técnicas de gestión y coordinación como BIM y auditorías externas como la ISO 9001 e ISO 14001.
Fase 1. Cierre del área de espacio público
El primer paso de la ejecución del proyecto de construcción es aislar la zona con objeto de proteger al público general. A menudo implica el vallado y la construcción de casetas de obra u oficinas que faciliten la gestión local. Estas requieren equipación en servicios como el de red eléctrica, conexión a internet o un área de aseos que faciliten la higiene y la seguridad y salud laboral.
Fase 2. Terreno y cimentación
Vías de tren, aeropuertos, presas. Toda infraestructura de ingeniería civil y construcción requiere de una limpieza y nivelación del terreno con objeto de construir una cimentación sólida que aguante las cargas tanto de uso final como las que aparecen a lo largo de las distintas fases de construcción.
La cimentación es un punto clave que ha de ser calculado y ejecutado de forma precisa y con un elevado grado de calidad. Este elemento estará soterrado y será de muy difícil acceso a posteriori. La ejecución ha de ser quirúrgica, y los movimientos de tierras contar con un estudio de impacto ambiental.
Fase 3. La estructura de la construcción
Todas las construcciones y obras tienen una estructura o esqueleto. En los puentes resulta fácil identificar los pilares, o en los edificios ver el armazón de hormigón pretensado. En autopistas y carreteras la estructura del pavimento la componen capas de sedimento como la subrasante, subbase, base y asfalto.
En esta fase la implantación de métodos BIM, como utilizamos en Ferrovial en la gestión de las obras, resulta indispensable para trabajar sobre un modelo virtual tridimensional a la par que se lleva a cabo la ejecución de la obra. La calidad final y el mantenimiento posterior se benefician de estas técnicas digitales.
Fase 4. Instalaciones de la construcción
Las instalaciones son todos aquellos elementos auxiliares que no forman parte de la estructura pero que se necesitarán durante la vida útil de la infraestructura. Canaletas para agua o desagüe, conductos de ventilación, tubos para la fibra óptica o red de iluminación, entre otros.
Si el modelado BIM era relevante ya en la fase previa, en esta se observa todo su potencial al catalogar componente a componente. A lo largo de todas las etapas de la construcción se realizan inspecciones periódicas, generalmente a mitad y final de cada fase, para asegurar la calidad final.
Fase 5. Aislamiento e impermeabilización
Quizá una de las fases más importantes a la hora de asegurar la durabilidad de la obra es el aislamiento frente a los elementos y la impermeabilización, que determinará la resiliencia futura de la estructura. El comportamiento del agua durante años es un factor que hay que tener muy presente en toda obra civil.
Fase 6. Acabados y cierres
Los últimos ítems constructivos tienen un importante peso visual, pero también resultan funcionales. Cristalería, cerrajería o carpintería entran dentro de la fase de acabados. Es el final de la obra de construcción propiamente dicha, aunque para su cierre serán necesarias varias inspecciones de calidad.