¿Qué es una moto eléctrica?

Las motocicletas eléctricas estilo scooter son vehículos de dos ruedas propulsados por motores eléctricos que combinan el diseño icónico de una motocicleta scooter con la eficiencia y sostenibilidad de la propulsión eléctrica. Las motos eléctricas son una opción cada vez más popular para la movilidad urbana, que ofrecen una alternativa limpia y eficiente a las motocicletas de combustión interna tradicionales.

¿Cómo funciona una moto eléctrica?

El motor de una motocicleta eléctrica funciona de manera diferente a los motores de combustión interna. En lugar de quemar combustible, las motocicletas eléctricas utilizan un motor que convierte la energía eléctrica de la batería en energía mecánica para impulsar la rueda trasera. Para esto, se emplean los controladores electrónicos equipados en la empuñadura del manillar que regulan la potencia entregada al motor según las órdenes del conductor. Cuando el conductor gira el puño del acelerador, el controlador aumenta la potencia suministrada al motor, lo que acelera la motocicleta. Algunas motos eléctricas cuentan con sistemas de frenado regenerativo que convierten parte de la energía cinética en electricidad que se devuelve a la batería para recargarla cuando el conductor aplica los frenos del manillar.

¿Qué tipo de batería se utiliza en las motos eléctricas?

La autonomía de una motocicleta eléctrica depende de la capacidad de la batería. En la actualidad, las baterías de iones de litio son las más comunes. La autonomía típica varía desde unos 40 kilómetros hasta más de 100 km con una sola carga, dependiendo del modelo y las condiciones de conducción, como pueden ser: la velocidad empleada, las paradas, el peso del vehículo y del conductor, la inclinación del terreno, la temperatura del ambiente y otros factores.

¿Qué ventajas tienen las motos eléctricas en la movilidad urbana?

Uno de los mayores beneficios de las motocicletas eléctricas estilo scooter es su impacto ambiental reducido. No emiten gases contaminantes ni partículas nocivas y contribuyen a la reducción de la contaminación del aire en áreas urbanas.

Otra de las características notables de las motos eléctricas es que sus motores son sumamente silenciosos y no generan vibraciones, por lo que reducen considerablemente la contaminación ambiental característica de sus pares de motores de combustión.

Las motocicletas eléctricas tienen costos operativos más bajos en comparación con las motocicletas de gasolina, debido a qué, según el método con el que se produzca, la electricidad tiende a ser más económica que la gasolina. Por otro lado, los motores eléctricos requieren menos mantenimiento que los de combustión.

Debido a sus características, las motos eléctricas estilo scooter son vehículos ideales para el alquiler compartido o motosharing. Esta es una modalidad de alquiler de vehículos por horas o minutos para cubrir una necesidad de movilización puntual. En muchas ciudades, las flotas de vehículos compartidos, aparcados en la vía pública o en puntos específicos de recogida, dispuestos para su alquiler a través de una aplicación móvil, están aumentando cada vez más. Esta forma de transporte se presenta como una alternativa más sostenible que la adquisición individual de un vehículo por cada usuario.

¿Cuáles son las diferencias entre las motos eléctricas y los scooters eléctricos?

El término moto eléctrica se prefiere al de scooter eléctrico, puesto que puede causar confusión. En inglés, la palabra scooter se usa ampliamente para referirse a los patinetes o monopatines. Los patinetes eléctricos son también una gran alternativa de movilidad urbana que ha ganado popularidad en los últimos años. Los e-scooters suelen tener un diseño compacto y ligero, con un manillar para dirigir y un sistema de frenos. El motor eléctrico se encuentra ubicado en la base de la plataforma y es alimentado por una batería recargable. Los usuarios pueden acelerar y frenar mediante un gatillo o palanca en el manillar.

Aunque ambos vehículos eléctricos tienen en común que poseen dos ruedas alineadas una delante de la otra, y que la primera sirve para pivotar la dirección del vehículo que se mantiene en equilibrio dinámico mientras el conductor se encuentra en desplazamiento, el diseño y posición de conducción resulta la diferencia más evidente entre estos dos tipos de vehículos. El patinete eléctrico consta de una plataforma horizontal estrecha que se encuentra cercana al suelo, en la que el usuario va normalmente de pie mientras se sostiene del manillar que está anclado verticalmente a la parte delantera de la plataforma. Las motos eléctricas estilo scooter, en cambio, brindan una mayor comodidad. Su diseño parte del de una bicicleta de paseo, con un cuadro abierto y un cómodo asiento al que se le incorpora una plataforma para posar los pies. Las ruedas de este tipo de motocicletas suelen ser más pequeñas que las de las motos convencionales, pero bastante más grandes que las de los patinetes.

La otra gran diferencia está en la potencia y la autonomía. Los patinetes eléctricos están diseñados para cubrir distancias urbanas cercanas a los 20 km, mientras que las motos eléctricas suelen superar los 80 km de autonomía.