Fuente de alimentación
¿Qué se entiende por fuente de alimentación?
Se conoce como fuente de alimentación, o power supply en inglés, al dispositivo que se utiliza para convertir la corriente de la red eléctrica en una forma de energía adecuada para los componentes de un dispositivo o sistema electrónico. Generalmente, la fuente de alimentación transforma la corriente alterna de la red eléctrica en corriente continua.
¿Qué características tienen las fuentes de alimentación?
Una fuente de alimentación puede ser interna o externa, dependiendo de si está integrada en el dispositivo al que alimenta o no. Su capacidad varía según los requerimientos del dispositivo al que alimenta, y se mide en vatios.
Las fuentes de alimentación, además, pueden incluir otros elementos que sirven para proteger la vida útil de los dispositivos, como:
- Reguladores de tensión.
- Protectores contra cortocircuitos.
- Protectores de sobretemperatura.
¿Para qué se utiliza una fuente de alimentación?
Las aplicaciones de las fuentes de alimentación son tan amplias como la gama de dispositivos electrónicos. Algunos de los principales usos son los siguientes:
- Computación: hardwares y servidores.
- Telecomunicaciones: routers, sistemas de transmisión, equipos en red, etc.
- Electrodomésticos.
- Ciencia: equipos de laboratorio.
- Medicina: equipos médicos de diagnóstico y monitoreo, sistemas de soporte vital, etc.
¿Cómo se calcula la capacidad de una fuente de alimentación para un dispositivo?
Para calcular la capacidad de la fuente de alimentación para un dispositivo específico es necesario identificar sus componentes, en particular los que tienen más requisitos energéticos. En ordenadores, suelen ser la placa madre, la tarjeta gráfica, el disco duro, etc.
Cada uno de estos componentes tendrá un requerimiento energético expresado en vatios. La suma de estos valores será la capacidad requerida. Sin embargo, para garantizar el correcto funcionamiento de la fuente de alimentación, es necesario calcular un margen de seguridad de entre el 10% y el 20%.
Para aplicaciones domésticas es posible consultar las especificaciones de los fabricantes. También existen herramientas online para calcular la capacidad necesaria en cada caso, en particular para ordenadores hechos a medida por los usuarios.