Capa de Ozono
¿Qué es la capa de ozono?
La capa de ozono, como lo dice su nombre, es una capa de gas ozono (O3) que se encuentra en la atmósfera del planeta Tierra, y que ocupa el espacio comprendido entre los 10 y los 50 kilómetros por encima de la superficie terrestre.
La capa de ozono reúne el 90% del ozono que existe en la atmósfera terrestre, y absorbe casi el 100% de la radiación ultravioleta de alta frecuencia que proviene del sol, permitiendo la vida terrestre como la conocemos.
¿Para qué sirve la capa de ozono?
La capa de ozono forma un escudo protector que absorbe gran parte de los rayos ultravioleta (UV) de la radiación solar, dejando filtrar, mayormente, solo la luz visible.
La capa de ozono es importante porque los rayos UV pueden ocasionar gran cantidad de efectos negativos sobre la vida terrestre. Algunos de estos son:
- Alteración del ADN de los seres vivos, causando mutaciones genéticas que pueden llevar a innumerables problemas de salud.
- Lesiones en la piel, como quemaduras, envejecimiento prematuro y aumento del riesgo de cáncer de piel.
- Reducción de la fotosíntesis en las plantas debido al deterioro de las moléculas de clorofila. Esto puede tener consecuencias negativas sobre el equilibrio de los ecosistemas.
- Desequilibrios en la vida marina. Así como en la vida terrestre, la radiación UV también puede tener efectos perjudiciales en la vida que se desarrolla bajo el agua (daño del ADN, problemas de reproducción, reducción de la fotosíntesis en los organismos marinos, etc.).
¿Cuáles son los principales riesgos para la capa de ozono?
Durante los años 70, la capa de ozono sufrió importantes pérdidas de densidad a causa de compuestos clorofluorocarbonados (CFC) generados por diversas actividades humanas, especialmente las relacionadas con los aerosoles y la refrigeración. Los CFC liberados a la atmósfera se descomponen y liberan átomos de cloro que, a su vez, destruyen las moléculas de ozono.
A este fenómeno se le conoce como agujero de la capa de ozono, y ha generado preocupación desde entonces.
Otros compuestos químicos que deterioran la capa de ozono son:
- Halones: contienen bromo, cloro y flúor, y se utilizan como agentes extintores de incendios, aunque han sido progresivamente reemplazados por alternativas más sostenibles.
- Hidroclorofluorocarbonos (HCFC): contienen cloro, flúor e hidrógeno, y se utilizan como refrigerantes y como agentes espumantes en la producción de plásticos y aislantes.
- Tetracloruro de carbono (CCl4): contiene cloro y carbono, y se utiliza en la producción de refrigerantes y disolventes, entre otros.
- Metilcloroformo (CH3CCl3): contiene carbono, hidrógeno y cloro. Se utiliza como disolvente y como limpiador en la industria electrónica.
- Halocarbonos de vida corta (VSLS): contienen cloro y bromo. Aunque tienen una vida corta en la atmósfera (usualmente menos de 6 meses), tienen una alta capacidad para degradar el ozono. Se utilizan para la fabricación de solventes, productos de limpieza, refrigerantes y propulsores de aerosol.
¿Qué medidas se han tomado para la protección de la capa de ozono?
En 1987, frente al alarmante crecimiento del agujero de la capa de ozono, se estableció el Protocolo de Montreal en más de 190 países. El protocolo estipulaba la eliminación gradual de los CFC y otros compuestos químicos perjudiciales para la capa de ozono.
A partir de entonces se ha desarrollado la investigación en torno a la composición y la dinámica de la capa de ozono para desarrollar estrategias eficaces de recuperación. También se le ha dado gran importancia al monitoreo de su espesor y su distribución a lo largo del planeta.
La necesidad de eliminar los compuestos químicos perjudiciales para la capa de ozono ha llevado al desarrollo de tecnologías alternativas en diferentes sectores, como la refrigeración, la industria y los aerosoles. Esto ha permitido continuar las actividades humanas reduciendo su impacto negativo en esta capa.
La educación y concienciación han sido fundamentales para fomentar la cooperación internacional y el compromiso de los diferentes actores para proteger la capa de ozono. La difusión de información sobre los efectos de la disminución de la capa de ozono y los riesgos de la exposición a la radiación UV han motivado a las personas a reducir su impacto. Por otra parte, el cambio de los hábitos de consumo es el aliciente final para que las empresas modifiquen sus productos y procesos.
Gracias a la conjunción de esta serie de factores, los niveles de ozono se estabilizaron durante la década de los 90, y en los 2000 empezó a revertirse el proceso de deterioro. Hoy en día la capa de ozono se encuentra casi restaurada y los estudios científicos apuntan a que estará completamente regenerada en un par de décadas.
La protección de la capa de ozono está relacionada de forma directa con cuatro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos por la Organización de las Naciones Unidas para el año 2030:
- ODS 13: Acción por el clima.
- ODS 12: Producción y consumo responsables.
- ODS 14: Vida submarina.
- ODS 15: Vida de ecosistemas terrestres.