Estrategia de salud, seguridad y bienestar
La seguridad, la salud y el bienestar en el lugar de trabajo son fundamentales para alcanzar la excelencia operativa, ya que refuerzan nuestro compromiso con todas y cada una de las personas que forman parte de nuestro equipo. Esto implica trabajar para aplicar medidas de prevención de riesgos laborales.
Una de las formas de hacerlo es estableciendo los cuatro pilares de nuestra estrategia de seguridad, salud y bienestar:
Resiliencia
Conocida como la capacidad de un sistema para ajustar su funcionamiento antes, durante o después de los cambios o perturbaciones y, por tanto, mantener el funcionamiento normal a pesar de las circunstancias. Ahora sabemos que a veces las cosas van mal, por lo que es necesario tener en cuenta la posibilidad de que se produzcan fallos y tenerla en cuenta en los planteamientos de gestión pertinentes. En este sentido, la resiliencia desempeña un papel fundamental al ayudarnos a dar un paso más allá del enfoque convencional hacia uno que nos permita hacer frente a cualquier situación, por inesperada que sea.
Esta evolución de la resiliencia sirve para apuntalar nuestro conocimiento de los métodos y técnicas existentes, ya que los mejoramos constantemente. Sólo podemos avanzar si entendemos nuestro día a día y cómo responder a cosas que de otro modo serían invisibles para nosotros.
Competencia
Para que esta cultura sea lo más eficaz posible, también es necesario garantizar que los empleados, que son los que tienen la responsabilidad, tengan todo lo que necesitan para hacer el trabajo.
Recientemente hemos identificado un conjunto de buenas prácticas para ofrecer un enfoque más estructurado y coherente de la competencia, y en este contexto se ha concebido la «Licencia para operar».
El objetivo de esta iniciativa es identificar los puestos que son críticos para la seguridad, garantizar que las personas tienen las competencias que necesitan para el trabajo, que las necesidades de formación de la organización se evalúan con precisión y que los compañeros están preparados para el desarrollo de su carrera y la movilidad en toda la empresa.
Liderazgo
Nuestros líderes son los que impulsarán el cambio hacia nuestro futuro. Tenemos la responsabilidad de inspirar a los compañeros y promover el cambio.
El liderazgo, en este caso, no se refiere necesariamente al del Comité de Dirección o de los mandos superiores o intermedios. Los mejores líderes son aquellos que ayudan a sus colaboradores a mejorar sus hábitos. El objetivo es ver a las personas como colaboradores, ya que representan la solución, no el problema.
También es importante reconocer y recompensar los logros y la participación de los equipos. Cuando se valora a los compañeros y su trabajo, se aumenta su satisfacción y productividad, motivándolos a mejorar su rendimiento.
Compromiso
Las encuestas muestran que las empresas con un mayor nivel de compromiso tienen un 70% menos de accidentes que las empresas con menos compromiso.
Para fomentar el compromiso, es importante establecer la seguridad como un valor fundamental de la cultura corporativa, aplicar un refuerzo positivo y hacer que los compañeros sientan que son dueños del proceso de seguridad. La implicación del equipo es importante para crear un entorno de trabajo seguro en el que los empleados no sólo se sientan seguros para trabajar, sino también para hablar cuando haya un problema. Cuando todos los compañeros se comprometen con la seguridad a todos los niveles, todos se convierten en gestores de la seguridad, ayudando a garantizar que todos lleguen a casa sanos y salvos al final del día.